Convertir lúmenes a vatios
El lumen es la unidad de flujo luminoso e indica la cantidad total de luz emitida por la fuente de luz. La potencia (vatios) indica la cantidad de consumo de energía de una lámpara. A medida que las luces se vuelven cada vez más eficientes desde el punto de vista energético, la potencia en vatios de las fuentes luminosas disminuye cada vez más. Por ejemplo, para reemplazar una lámpara incandescente por una de LED, se debe comparar que la salida de lúmenes sea equivalente. Vea la tabla de abajo para comparar los vatios con los lúmenes en distintos tipos de bombilla.
Más información sobre la conversión lumen-vatio
Pasarse a los LED compensa en todos los aspectos, pero sabemos que cambiar la tecnología de las luminarias puede resultar un poco confuso al principio. Como acabamos de ver, cuando quieres cambiar de una bombilla convencional a una bombilla LED, para mantener la misma potencia luminosa tienes que comparar lúmenes, no vatios.
En aras de la claridad, hemos creado páginas dedicadas a la conversión de diferentes potencias en lúmenes. Sólo tienes que hacer clic en uno de los enlaces que aparecen a continuación para saber cuál es la mejor forma de sustituir tu bombilla vieja. ¡No pierdas el tiempo!
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¿Cuál es la diferencia entre lúmenes y vatios?
En este vídeo puedes ver claramente las diferencias entre bombillas incandescentes, de bajo consumo y LED. De hecho, mientras que las bombillas clásicas consumen mucha energía (número de vatios elevado), las bombillas LED consumen mucho menos y además emiten más luz (número de lúmenes).
La temperatura de color de la luz
Para determinar qué tipo de lámpara necesita, también es importante observar la temperatura del color. La temperatura de color indica el color de la luz proveniente de la lámpara y se indica en Kelvin. Cuanto menor es el número de grados en Kelvin, más cálido es el color de luz. Las temperaturas de color más comunes (Kelvin) son:
- 2700 Kelvin: luz blanca muy cálida. Proporciona una atmósfera relajante e íntima (viviendas)
- 3000 Kelvin: luz blanca cálida. No demasiado cálida. Agradable a la vista (comercios textiles)
- 4000 Kelvin: luz blanca fría. Luz blanca neutra, no demasiado fría. Ideal para entornos de trabajo (oficinas)
- 6500 Kelvin: luz del día. Similar a la luz del día. Aplicable en áreas donde todo debe ser claramente visible (fábricas, almacenes, etc)